Te muestro mi verdad, mi debilidad, no porque sea cobarde, sino porque espero sinceramente que me conozcas y participes en mi vida. El amor son momentos de debilidad, es el sentimiento de pedir ayuda a los demás, no es pedir a otros que den, es pedir a otros que participen. El verdadero amor nunca es la limosna de un fuerte a un débil, sino la presencia de dos almas de pie juntas en su vulnerabilidad. El amor es la existencia compartida después de que el yo sincero ha sido visto. El amor no es pedir respuestas, sino una invitación sincera para que entres en mi vida y participes en mi mundo emocional, enfrentando y experimentando juntos esta vulnerabilidad. El amor es una apertura mutua basada en la realidad, un testimonio mutuo, acompañamiento mutuo y carga compartida.
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Te muestro mi verdad, mi debilidad, no porque sea cobarde, sino porque espero sinceramente que me conozcas y participes en mi vida. El amor son momentos de debilidad, es el sentimiento de pedir ayuda a los demás, no es pedir a otros que den, es pedir a otros que participen. El verdadero amor nunca es la limosna de un fuerte a un débil, sino la presencia de dos almas de pie juntas en su vulnerabilidad. El amor es la existencia compartida después de que el yo sincero ha sido visto. El amor no es pedir respuestas, sino una invitación sincera para que entres en mi vida y participes en mi mundo emocional, enfrentando y experimentando juntos esta vulnerabilidad. El amor es una apertura mutua basada en la realidad, un testimonio mutuo, acompañamiento mutuo y carga compartida.